Para brindarle la mejor experiencia posible, este sitio utiliza cookies. El uso de su sitio significa que está de acuerdo con nuestro uso de cookies. Hemos publicado una nueva política de cookies, que deberías necesitar para saber más sobre las cookies que utilizamos.
Contra lo que muchos lectores creen, la literatura mexicana del siglo XIX constituye una etapa brillante e intensa, en que los escritores se hallaban envueltos en un constante caos político y militar. El bandidaje, la corrupción en la administración pública y privada, así como la orfandad, son algunos de los aspectos negativos que recorren las representaciones de la realidad circundante que los artistas plasmaron en su literatura. De la vasta gama de novelas de aquel periodo, tres son –a juicio del autor de este ensayo de literatura comparada– las más representativas tanto por sus dimensiones socio-políticas e incluso míticas, como por su profundidad y actualidad: Los bandidos de Río Frío, de Manuel Payno, Astucia, de Luis G. Inclán, y El Zarco, de Ignacio Manuel Altamirano. Un descendiente de criollos, un mestizo y un indígena escriben sobre un tema común: el caos social y político en que se debate su país. ¿Hasta qué punto no hemos salido de ese caos?, ¿por qué estas novelas aún nos parecen actuales?, ¿por qué México, sigue inmerso en la pobreza de muchos y en el personalismo que impulsa a las clases privilegiadas hacia la corrupción e inmoralidad en el manejo de las riquezas? En este libro e analizan las condiciones sociales en que se desarrollan las novelas y cómo éstas parten de una serie de los hechos reales. A continuación se examinan los elementos mítico, ideológico y civilizador que yacen en las obras. Como expresa al autor: “ Los objetivos de esta relectura de tres de las novelas decimonónicas que coinciden en su visión humanística y en su gran sensibilidad social, van más allá de destacar la importancia y actualidad de Inclán, Payno y Altamirano como novelistas sociales y de reivindicar sus obras como textos épicos nacionales y no como meros antecedentes literarios, también se pretende propiciar una relectura crítica y a una nueva luz de estas novelas representativas de nuestra letras, rastrear el pensamiento social de sus autores y comprobar que estas obras pertenecen a la gran epopeya nacional”.